Ya lo he comentado en otra entrada: hace poco instalaba en mi viejo MacBook Pro de más de 15 años, el sistema operativo Fedora para devolverlo a la vida. En principio todo fue bien, pero intentando pasar a Fedora 41, el sistema dejó de funcionar y no he conseguido volver a poner en marcha… así que he decidido cambiar de SO y pasarme a Linux Mint. Ha sido todo un acierto: todo funciona a la perfección sin tener que hacer instalaciones extra de drivers wifi o de repositorios mediante línea de comandos. Te lo cuento en un momento.
Te recuerdo que Linux Mint está basado en Ubuntu, pero tiene un enfoque más práctico con una interfaz perfecta si vienes de Windows o macOS, y quitándonos la Snap Store de Ubuntu (¡bien!). Por supuesto, es un SO gratuito, requiere muy poco mantenimiento y tiene un soporte muy largo en cada versión (LTS).
- También lo he instalado en un portátil HP ELITEBOOK. Todo perfecto y sin problemas.
Instalamos Linux Mint en un MacBook Pro de 2010
Descargamos Linux Mint e instalamos la imagen en un pen USB
He utilizado la versión Linux Mint 22 Cinnamon edition. Si tienes poca RAM o ves que todo funciona muy lento, decántate por la versión Xfce.
Después de descargar el SO, tenemos que meter el archivo en un pen USB previamente formateado a FAT32 y usar, por ejemplo, Balena Etcher para crear un USB que arranque al iniciar el sistema del Mac.
Conectamos el USB al MacBook Pro y arrancamos el sistema
Conectamos el pendrive USB con Linux Mint a nuestro MacBook Pro apagado y lo encendemos teniendo la precaución de apretar inmediatamente la tecla opción (ALT), a la izquierda de la tecla CMD. Con esto entraremos en el menú que nos va a permitir arrancar el ordenador desde el USB e instalar la imagen de Linux Mint en el MacBook.
Instalamos Linux Mint
- Mi MacBook Pro con Intel Core 2 Duo CPU, tarjeta gráfica NVDIA Geforce 320M y 8 GB de memoria RAM
Puedes conectar un cable Ethernet desde tu mac hasta el router para asegurarte una conexión estable a internet, pero también puedes configurar tu conexión wifi sin problema. Siempre prefiero hacer estas cosas con el cable Ethernet conectado.
No entro en profundidad en los pasos de la instalación, ya que no vas a tener ningún problema en hacerla. Solo tienes que seguir los pasos para configurar unas cuantas cosas como región, teclado, particiones (no he cmabiado nada) y demás. Como siempre.
Lo que sí te interesa instalar y poner en marcha son los controladores propietarios para la tarjeta wifi Broadcom de tu mac (en el caso de que la tenga). Linux Mint te va a recomendar que los instales al terminar la instalación. Me ha encantado esta opción: nada de tener que imaginar que es lo que no funciona y porque.
Vas a encontrar la opción en el menú principal de la izquierda en la parte inferior en Administración > Gestor de controladores. Aplicas los cambios, y tu tarjeta wifi funcionará perfectamente sin mucho esfuerzo.
También puedes instalar CODECS extra para ver todo tipo de archivos multimedia o configurar las snapshots para volver a un punto determinado de tu instalación por si hay algún problema en el futuro.
¿Qué más cosas he hecho? Lo de siempre: actualizar el sistema para tener los últimos paquetes actualizados. Puedes hacerlo mediante la Terminal y los comandos:
sudo apt update
sudo apt upgradeO directamente puedes ir al gestor de paquetes y actualizaciones (en la barra inferior a la derecha el icono en forma de escudo):
También me he pasado por el Gestor de Software para instalar unas cuantas apps que suelo usar en todos mis sistemas:
1Password para acceder a mis contraseñas (que siempre uso en iOS o macOS), Konsole como Terminal, el navegador Brave, Stacer para limpiar el sistema de vez en cuando, Gufw para gestionar de forma gráfica el firewall, Syncthing para sincronizar archivos entre mis dispositivos en mi red local o VLC para ver archivos multimedia. Estos no son los únicos programas imprescindibles para Linux, pero es un buen modo de empezar.
Conclusión
desde que instalado este sistema, no he tenido ningún problema con mi antiguo MacBook, y su interfaz me gusta más que la que ofrece Fedora en sus últimas versiones. No he tenido problemas para conectarme a la wifi de red local y todo funciona de manera fluida en mi sistema con 8 GB de RAM. Totalmente recomendable instalar este SO en tu antiguo Mac.
